Trastorno de la Conducta Alimentaria y el uso de Redes Sociales
Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) constituyen un grupo de trastornos mentales caracterizados por una conducta alterada ante la ingesta alimentaria o la aparición de comportamientos de control de peso. Entre los tipos de trastornos alimenticios más frecuentes se incluyen la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa, el trastorno por atracón y el trastorno por evitación y restricción de la ingesta de alimentos.
Prevalencia de los trastornos de la alimentación
No sabemos exactamente cuántas mujeres u hombres sufren de los TCA. Se estima que entre el 0.3% y el 1% de mujeres sufren de anorexia nerviosa, y cerca del 3% sufren de bulimia nerviosa. Muchas más personas sufren de problemas alimenticios subclínicos (es decir, que no tienen un diagnóstico oficial de un TCA, pero experimentan varios síntomas). Además, muchas personas batallan con insatisfacción corporal, actitudes y conductas distorsionadas de la alimentación.
Hombres y mujeres pueden estar en riesgo de desarrollar un TCA; no obstante, el género y la socialización hacen que sean las mujeres quienes más riesgo tienen de poder desarrollar un TCA. Desde pequeñas, las mujeres aprenden la importancia que tiene su imagen corporal para la sociedad, la cual establece una conexión entre el aspecto físico y la valía personal.
Factores de riesgo en la parición de los TCA
Los factores de riesgo son aquellos que facilitan la aparición de los trastornos de la conducta alimentaria y la combinación de estos diferentes factores de riesgo puede provocar el desarrollo y mantenimiento de la enfermedad.
La asociación contra la anorexia y la bulimia (ACAB) distingue entre los factores de riesgo, los individuales, los familiares y los sociales.
Factores individuales
Entre los factores individuales que incrementan las posibilidades de padecer TCA están la predisposición genética, los rasgos psicológicos, tener una baja autoestima, una imagen corporal negativa, la propia etapa adolescente, y/o el sexo. De cada 10 casos de TCA, 9 son mujeres.
Factores familiares
Por otra parte, el contexto familiar según ACAB también es un factor de riesgo, sobre todo en personas vulnerables como pueden ser las chicas adolescentes.
Dentro del núcleo familiar pueden acontecer cambios traumáticos en la estructura familiar para los que el niño/adolescente no dispone de herramientas con las que enfrentarse y pueden alterar su correcto desarrollo, tales como la muerte de uno de los miembros, un periodo largo de enfermedad por parte de alguien de la familia, la pérdida de trabajo de alguno de los progenitores, la separación entre cónyuges. También se pueden dar otros factores más específicos como las críticas referentes al físico o los refuerzos positivos que promueven la asociación entre belleza y delgadez, un ambiente rígido y con problemas de comunicación o familias con baja cohesión y adaptabilidad.
Factores sociales
Hay diversos factores sociales que han venido acompañado de un incremento muy notable de la incidencia de casos de TCA.
- El modelo de belleza imperante, que ensalza una delgadez excesiva.
- El sistema de tallaje actual.
- Ciertas actividades deportivas, en las que se compite por categorías de peso o la danza debido al trato que hacen de la imagen.
- La presión social por cumplir o parecerse al modelo de belleza actual.
Las redes sociales y los TCA
El auge de las nuevas tecnologías y en concreto del uso de las redes sociales, suponen un riesgo para el desarrollo y mantenimiento de TCA.
Impresión de cánones de belleza muchas veces inalcanzables
Redes sociales como Instagram, utilizadas principalmente para subir fotos de contenido personal y obtener validación, generan una idea sobre los cánones de belleza a alcanzar. Estos son tan poco ajustados a la realidad de la mayor parte de la sociedad que el perfeccionismo y la autoexigencia juegan un papel esencial en el intento de llegar a ese lugar inalcanzable.
Constantemente se establecen comparaciones, de forma automática con las imágenes que vemos en internet sobre cómo de delgados, guapos, fuertes… debemos estar para conseguir la validación por parte de nuestro grupo de iguales.
Personas sin formación profesional
Además, son numerosas cuentas sin ningún tipo de formación profesional, en múltiples apps, como por ejemplo Tiktok, Facebook o Instagram, las que publican y divulgan información sobre cómo podemos hacer para alcanzar esos cánones de belleza. Ejemplo de contenido problemático en relación con los TCA, son:
- La publicación de dietas milagro.
- Rutinas que aproximan a la persona a la restricción de alimentos, como los famosos «ayunos intermitentes».
- Rutinas de ejercicio diarias destinadas a «quemar calorías».
- Promocionan la venta de planes de entrenamiento, dietas, o productos como laxantes o complementos alimenticios que prometen figuras que siguen el canon de belleza.
Estar expuestos a este tipo de información diariamente supone un riesgo real para las personas que la consumen de desarrollar un TCA, o conductas compatibles con estos trastornos.
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